Rodolfo J Stusser
Antecedentes: La medicina de atención primaria (AP), si bien fomenta los pocos estados de salud positivos (+) y factores potenciadores de los pacientes, ha curado en su mayor parte muchos estados de salud/enfermedad negativos (-) y factores de riesgo. En 2013, diseñamos un programa de investigación estadounidense para la mejora de la calidad y el costo de la atención médica midiendo los resultados de salud global del paciente utilizando registros de salud electrónicos y datos sociobiodetectados.
Objetivo: Justificar y diseñar una red de información móvil inteligente y de distribución de información mediante PC de salud de amplio espectro en EE. UU.
Métodos: 1) Evaluación cuasiexperimental de los efectos de las revoluciones democrático-científica-industrial en 193 naciones y los EE. UU., evaluadas a partir de las tendencias de 106 variables de vida-salud, teórico-tecnológicas desde 1750 hasta 2015, y 2) optimización mediante análisis de sistemas y categorización por analogía del modelo médico de PC.
Resultados: La modernización prácticamente ha triplicado la expectativa de vida humana, al difundir los avances en salud y vida y controlar las enfermedades/lesiones nutricionales-infecciosas y materno-infantiles. En el período 1957-2014, la expectativa de vida aumentó ligeramente más lentamente que en el período 1900-1956, a pesar de que la calidad, la igualdad y la supervivencia de las enfermedades/lesiones crónicas de alta letalidad mejoraron mucho, a través de avances biomédicos-biofarmacéuticos mucho más preventivos-terapéuticos y costos más altos. Esta diferencia en la tasa de aumento de la expectativa de vida parece estar vinculada a la incidencia persistentemente alta de enfermedades/lesiones crónicas relacionadas con trastornos crónicos y riesgos en lactantes, niños y adolescentes. Con un sistema de PC de prestación de servicios de salud de amplio espectro basado en el individuo para medir, mejorar y salvaguardar su reserva de salud, actualizado con ciencias/tecnologías de la información, podemos evaluar/reducir objetivamente la sobrecarga de información de salud de nuestros individuos jóvenes y adultos. Los equipos de médicos y enfermeras que lo gestionan pueden aumentar la inteligencia sanitaria individual, ayudando a procesar toda la información de su historial médico electrónico, enriquecida con dispositivos inteligentes portátiles a través de una red de teléfonos inteligentes y computadoras, potenciando la inducción de la autosalud con un rápido intercambio de datos de salud global desfragmentada, cultura, conocimiento, psiconeurobiofisiología (+ ± -). También debe aumentar la homogeneidad de los grupos de ensayos de estilo de vida/biomédicos en el índice de salud global, perfil, factores de pronóstico/potenciación y permitir el desarrollo de índices de salud poblacional integrales de abajo hacia arriba.
Conclusión: Aumentar la inteligencia sanitaria individual a través de la infomedicina integral de atención primaria debería incrementar la eficiencia de la atención sanitaria.