Antone L. Brooks
Abstracto
Esta presentación evalúa el papel de la dosis y la tasa de dosis en la inducción del cáncer. Es importante tener en cuenta que las dosis altas de radiación producen cáncer. El nivel estimado por la Academia Nacional de Ciencias es del 5% por Sievert. Dado que la mayoría de las exposiciones ambientales dan lugar a exposiciones en el rango de mSv y tasas de dosis prolongadas durante meses o años, la extrapolación de los datos de dosis altas a dosis bajas genera incertidumbre. El DOE financió un programa de investigación para estudiar los cambios biológicos inducidos por dosis bajas de radiación utilizando técnicas celulares y moleculares modernas combinadas con avances en la tecnología. Estos estudios determinaron que existe la necesidad de cambios básicos de paradigma en la biología de la radiación y sugirieron que las mutaciones y el daño cromosómico pueden no desempeñar el papel principal en la inducción del cáncer por radiación ionizante. En dosis altas de radiación, donde los aumentos de cáncer se pueden detectar fácilmente tanto en humanos como en animales de experimentación, hay una amplia muerte celular, desorganización de tejidos y daño tisular. Las tasas de dosis que dan lugar a dosis elevadas por recambio celular también producen una destrucción celular extensa, desorganización tisular, supresión inmunitaria, inducción de enfermedades inflamatorias crónicas, fibrosis y neumonitis y cambios en las vías metabólicas. Estas investigaciones sugieren que la destrucción celular y el daño tisular y las respuestas fisiológicas a ese daño son los principales mecanismos del cáncer de pulmón inducido por la radiación, no las mutaciones ni el daño cromosómico. En esta presentación se analizarán los cambios de paradigma y la necesidad de replantear seriamente los estándares de radiación y la implementación de medidas de protección tras la exposición a dosis bajas y tasas de dosis bajas en poblaciones humanas.