Daren Anderson, Sissi Wang, Ianita Zlateva
Antecedentes El objetivo de este estudio fue realizar una evaluación formativa integral del manejo del dolor crónico en un gran centro de salud comunitario de múltiples sitios y utilizar los resultados para diseñar una iniciativa de mejora de la calidad basada en un modelo de práctica basada en evidencia desarrollado por la Administración de Salud de Veteranos. Mejorar la calidad y la seguridad mediante la incorporación de prácticas basadas en evidencia (EBP) es un desafío, particularmente en prácticas clínicas con mucha actividad como los Centros de Salud Calificados Federalmente (FQHC). Los FQHC luchan con restricciones financieras, falta de recursos y poblaciones complejas de pacientes. Métodos El Marco de Promoción de la Acción para la Implementación de la Investigación en los Servicios de Salud (PARIHS) sirvió como base para la evaluación integral. Utilizamos una variedad de medidas y herramientas para examinar la atención del dolor desde una variedad de perspectivas. Los pacientes con dolor crónico se identificaron utilizando puntajes de dolor autoinformados y registros de prescripción de opioides. Empleamos múltiples estrategias de recopilación de datos, incluida la consulta a nuestro sistema de registros médicos electrónicos, revisiones manuales de historias clínicas y encuestas al personal. Resultados Encontramos que los pacientes con dolor crónico tenían tasas de utilización de atención primaria extremadamente altas, mientras que las tasas de derivación a especialidades relacionadas con el dolor eran bajas para estos pacientes. Existían grandes lagunas en la adhesión de los proveedores de atención primaria a las normas de documentación y práctica de la atención del dolor. Había una amplia variabilidad de los proveedores en la prescripción de opioides para tratar el dolor. Las encuestas al personal encontraron una variación sustancial tanto en el conocimiento del tratamiento del dolor como en la disposición al cambio, así como una baja confianza en la capacidad de los proveedores para controlar el dolor y una insatisfacción con los recursos disponibles para apoyar la atención del dolor crónico. Conclusiones Mejorar el tratamiento del dolor crónico en este centro de salud comunitario requiere una intervención multifacética destinada a abordar muchos de los problemas identificados durante la fase de evaluación. Durante la intervención, haremos mayor hincapié en aumentar las opciones de apoyo en materia de salud conductual y medicina complementaria, aumentar el acceso a la consulta con especialistas, proporcionar CME específico para el dolor a los proveedores y mejorar la documentación de la atención del dolor en los registros médicos electrónicos.