Presa Merete Eybye, Katrine Kaastrup Kolmos y Niels Bilenberg
Antecedentes : Monitorear el efecto de la medicación mediante una medida objetiva aportaría nuevas perspectivas al trabajo con pacientes que sufren Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
Objetivo : Con el fin de objetivar y monitorear la eficacia del tratamiento, se utilizó un Test de Rendimiento Continuo (Test QB) y se evaluó en la práctica clínica diaria.
Método : Se evaluaron 12 niños de entre 8 y 12 años que cumplían los criterios diagnósticos de TDAH mediante la prueba QB antes y después de la ingesta de metilfenidato.
Resultados : Una hora después de la ingesta de la dosis de prueba del medicamento, se observaron mejoras significativas en el número de omisiones (p = 0,014), tiempo de reacción (p = 0,038), respuestas correctas (p = 0,031) y actividad (p = 0,045). Se encontraron mejoras no significativas en la variabilidad del tiempo de reacción (p = 0,190) y en las respuestas incorrectas correctas (p = 0,764). El número de conjeturas y errores de comisión no varió después de la medicación.
Conclusiones : La prueba QB se puede utilizar para rastrear los efectos de la medicación, mostrando una mayor mejoría en los niños más desatentos e hiperactivos/impulsivos.