Jerzy Mrowicki, Malgorzata Mrowicka, Adam Dziki, Lukasz Dziki e Ireneusz Majsterek*
Las enfermedades inflamatorias intestinales no específicas (EII) son enfermedades particularmente problemáticas que afectan al tracto digestivo humano, en particular al intestino. Estas enfermedades se manifiestan en una inflamación intestinal crónica que es difícil de controlar, con períodos de exacerbaciones incontroladas y episodios que recuerdan a sí mismos. Dependiendo de los síntomas y su ubicación en el tracto gastrointestinal humano, estas enfermedades pueden presentarse en varias formas. Entre las dos formas más comunes de estas enfermedades se pueden distinguir la colitis ulcerosa (CU) y la enfermedad de Crohn (EC). Aunque la causa subyacente de la activación, así como el desarrollo posterior de estas enfermedades, no está claramente definida, se sabe que estos trastornos tienen un trasfondo autoinmune. La patogenia de la EII está asociada con una inflamación gastrointestinal crónica, idiopática, recurrente y mediada por inflamación. La enfermedad puede ser causada por cambios en los genes causados por varios factores o predisposición genética familiar. La exposición a una variedad de factores de riesgo ambientales puede conducir a la activación de la enfermedad en individuos susceptibles. Muchos de los diversos factores mencionados en el artículo, a los que las personas están expuestas en sus vidas, pueden influir en el desarrollo de estas enfermedades.