Yuh Baba y Yasumasa Kato
El receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR) se encuentra sobreexpresado en la mayoría de los carcinomas de células escamosas de cabeza y cuello (HNSCC), lo que lo convierte en un objetivo terapéutico importante. Aunque mutaciones específicas en el EGFR sensibilizan a los inhibidores de la tirosina quinasa del EGFR, estas mutaciones rara vez se observan en los HNSCC. Por lo tanto, los primeros ensayos clínicos de monoterapia con inhibidores del EGFR en pacientes con HNSCC han arrojado resultados decepcionantes. Las tasas de respuesta clínica a los inhibidores del EGFR se pueden mejorar mediante la identificación de biomarcadores adecuados. Uno de estos biomarcadores prometedores es PIK3CA, que codifica la isoforma α de la subunidad catalítica de la fosfoinosítido 3-quinasa; las mutaciones en este gen pueden predecir la eficacia de los inhibidores del EGFR.