Revista de VIH y virus retro Acceso abierto

Abstracto

Razones que llevan a la aceptación y declinación de la vacuna antigripal entre los trabajadores sanitarios tunecinos

Inés Cherif

A pesar de las recomendaciones, la cobertura de la vacuna antigripal (IV) entre los trabajadores sanitarios sigue siendo baja en muchos países. En este estudio, nos propusimos evaluar las principales razones que llevan a la aceptación y el rechazo de la vacuna antigripal entre los trabajadores sanitarios tunecinos a través de un estudio de conocimientos, actitudes y prácticas hacia la inmunización antigripal. Fue un estudio transversal realizado en centros de atención sanitaria primaria y secundaria de Túnez de marzo a mayo de 2019. Los profesionales sanitarios se inscribieron de acuerdo con un muestreo multietápico autoponderado. Se administró un cuestionario cara a cara a los participantes. Las razones que llevaron a la aceptación y el rechazo de la IV se evaluaron mediante preguntas abiertas. Se incluyó en el estudio un total de 1230 HCW con una edad media de 44,5 ± 9,3 años y una proporción de sexos (M: F) de 0,25. Entre los participantes, el 43,1% (IC del 95%: [40,3-46,0]) estaba dispuesto a recibir la vacuna antigripal si se recomendaba a los cuidadores y se proporcionaba de forma gratuita. Según los profesionales sanitarios participantes, las tres principales razones que llevaron a la aceptación de la vacuna fueron: autoprotección (73,8 % [71,3-76,3]) y protección de la familia y los pacientes (49,2 % [46,4-52,0] y 28,2 % [25,8-30,7] respectivamente). En cuanto a las razones que llevaron a rechazar la administración intravenosa, el miedo a los efectos secundarios de la vacuna (48,0 % [40,3-46,0]), la sensación de desinterés por la vacuna antigripal (31,8 % [29,3-34,4]) y la duda sobre la eficacia de la vacuna (31,6 % [28,8-34,3]) fueron las razones citadas con más frecuencia. Menos de la mitad de los participantes estaban dispuestos a recibir la administración intravenosa. El miedo a los efectos secundarios de la vacuna antigripal fue la razón más frecuentemente indicada que llevó a rechazar la vacuna. Por tanto, las autoridades sanitarias deberían organizar sesiones de formación periódicas en los centros sanitarios con el objetivo de educar a los cuidadores sobre la composición y la seguridad de la administración intravenosa.