Subash Chandra Sonkar
La aparición de infecciones de transmisión sexual (ITS) resistentes a múltiples fármacos está provocando una crisis de tratamiento en todo el mundo. Debido al uso extensivo de antibióticos en el pasado reciente, los agentes infecciosos desarrollaron resistencia a los antibióticos comúnmente utilizados para el tratamiento. Como resultado, estas cepas resistentes se convirtieron en un problema de salud pública en varios países, incluida la India. Los métodos basados en la prueba de amplificación de ácidos nucleicos (NAAT) pueden determinar el uso indebido y/o el uso excesivo de antibióticos a partir de una sola muestra de ADN. Al estudiar los patógenos causantes de infecciones específicas (Chlaymydia trachomatis, Neisseria gonorrhoeae y Trichomonas vaginalis) que se inscribieron en el estudio y recomendaron tratamientos utilizando las pautas recomendadas por la Organización Nacional de Control del SIDA (NACO) del Programa Nacional de Control del SIDA (NACP) con tratamientos de infecciones con medidas de laboratorio. Mal uso y uso excesivo de antibióticos en 588 mujeres tratadas sindrómicamente, 46 (7,82%) mujeres dieron positivo, mientras que 542 (92,17%) muestras dieron negativo para estos tres patógenos, según lo determinado por un ensayo basado en PCR. El porcentaje total estimado de uso excesivo y uso indebido de antibióticos en el estudio fue de 72,17% y 8,69% respectivamente. El tratamiento correcto y completo estimado en comparación con las medidas de laboratorio y NACP fue de 42/46 (91,30%). La prevalencia del uso excesivo de antibióticos se estimó azitromicina y cefixima (55,90%), combinación de doxiciclina, cefixima y metronidazol (31,18%) y combinación de doxiciclina, cefixima, metronidazol, azitromicina (13,65%). Las recomendaciones demuestran claramente que la prevalencia de infecciones sigue siendo significativa entre las pacientes femeninas que visitan los departamentos de obstetricia y ginecología. El estudio subraya la necesidad de realizar ensayos de diagnóstico para la identificación del patógeno causal antes de implementar el tratamiento con antibióticos a las pacientes con flujo vaginal. También divulga la necesidad de revisar el uso del manejo sindrómico de casos para controlar las enfermedades de transmisión sexual.