Muchas vidas se pierden a causa de la propagación de infecciones en los hospitales. Los trabajadores de la salud pueden tomar medidas para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas, que incluyen Cubrirse al toser y estornudar, Mantenerse al día con las vacunas, Usar guantes, máscaras y ropa protectora, Tener disponibles pañuelos desechables y limpiadores de manos, Seguir las pautas del hospital al tratar con sangre o elementos contaminados, etc.