Este término implica un comportamiento desadaptativo que perjudica la capacidad del individuo para realizar las funciones diarias normales. Estos comportamientos desadaptativos impiden que el individuo lleve un estilo de vida normal y saludable.
El comportamiento disfuncional no siempre es causado por un trastorno, puede ser voluntario. Estas disfunciones incluyen depresión, demencia, psicosis, trastornos del sueño derivados de la enfermedad de Parkinson y Huntington, síndrome de Tourette, así como atrofia multisistémica, parálisis supranuclear progresiva y degeneración corticobasal.