La salud reproductiva se define como un estado de bienestar físico, mental y social en todo lo relacionado con el sistema reproductivo, en todas las etapas de la vida. Una buena salud reproductiva implica que las personas puedan tener una vida sexual satisfactoria y segura, la capacidad de reproducirse y la libertad de decidir si hacerlo, cuándo y con qué frecuencia.
Hay dos tipos de reproducción: Reproducción asexual y sexual
La reproducción asexual genera descendencia que es genéticamente idéntica a un solo progenitor. En la reproducción sexual, dos padres aportan información genética para producir una descendencia única.