La esquizofrenia se caracteriza por una percepción alterada de la realidad, que incluye pensamientos delirantes, alucinaciones y habla y comportamiento desorganizados.
La esquizofrenia es un trastorno grave que afecta la forma en que una persona piensa, siente y actúa. Alguien con esquizofrenia puede tener dificultad para distinguir entre lo real y lo imaginario; puede no responder o retraerse; y puede tener dificultad para expresar emociones normales en situaciones sociales.