El manejo del trauma es un conjunto de protocolos o pautas de práctica para ayudar a los profesionales a tratar con pacientes con lesiones agudas. Incluye los siguientes pasos: Evaluación inicial y tratamiento (reanimación, intubación, ventilación, hemodinámica y shock), Examen físico (evaluación de la parte lesionada), Evaluación radiológica, Evaluación angiográfica y resonancia magnética. La clave del éxito detrás del tratamiento de un paciente traumático es la comprensión de las prioridades inmediatas.