Kerstin Brakmann, Hendrik Spriestersbach, Felix Berger y Boris Schmitt
Antecedentes: Los modelos ovinos se utilizan ampliamente en la investigación cardiovascular debido a su comparabilidad con el sistema cardiovascular humano. Las ovejas están bien disponibles, son fáciles de manejar, en su mayoría indulgentes y la anestesia es similar en comparación con los humanos. Sin embargo, se conocen diferencias en cuanto a la composición de los componentes de la sangre y las propiedades reológicas, así como la administración oral y la reabsorción de algunos fármacos. Entre ellos, los inhibidores plaquetarios, los antagonistas de la vitamina K y la heparina de bajo peso molecular (HBPM) muestran diferente farmacodinámica. Durante la implantación de válvulas cardíacas es esencial reducir la capacidad de coagulación con el objetivo de prevenir eventos tromboembólicos. Al mismo tiempo, es esencial evitar cualquier complicación hemorrágica por acumulación de anticoagulantes. En la mayoría de los experimentos con ovejas para la investigación cardiovascular, el régimen anticoagulante sigue las pautas para los humanos debido a la falta de conocimiento sobre los requisitos ovinos específicos. Hasta la fecha, no se ha establecido una estrategia de anticoagulación estandarizada para el modelo ovino que utiliza HBPM. Este estudio tuvo como objetivo establecer un régimen confiable para la administración de HBPM en ovejas con alto riesgo de eventos tromboembólicos. El objetivo era alcanzar un nivel de anti-factor Xa (AFXa) de 0,6 a 0,8 unidades, que se sabe, a partir de estudios en humanos, que es preventivo y terapéutico en casos de riesgo moderado a alto de tromboembolia. El objetivo principal del estudio era mejorar el tratamiento antitrombótico después de la implantación de una válvula pulmonar en tres ovejas. Estos resultados se aplicaron y reevaluaron durante la implantación mínimamente invasiva de una válvula cardíaca en cuatro ovejas.
Materiales y métodos: Se incluyeron en este estudio siete ovejas adultas de raza gris cornuda (peso corporal medio de 43,4 kg) antes de la implantación de una válvula cardíaca. El diseño del estudio consideró la implantación de una válvula cardíaca intervencionista como una situación de riesgo intermedio de eventos tromboembólicos. Durante un período de dos semanas, se administró una dosis semanal incremental de dalteparina una vez al día a las 7 a. m. por vía subcutánea. Se recogieron muestras de sangre venosa tres veces al día para controlar la respuesta durante 24 horas. La primera medición del anti-factor Xa se realizó inmediatamente antes de la administración de heparina (valor inicial). La segunda medición se realizó cuatro horas y la última medición 12 horas después de la administración. La dosis inicial en la semana 1 fue de 250 UI (unidades internacionales). La dosis siguiente en la semana 2 comprendió 350 UI. La dosis con un nivel de anti-factor Xa más cercano a 0,6 a 0,8 unidades se probó en cuatro ovejas en las que se implantó una válvula pulmonar por vía transvenosa.
Resultados: Los datos mostraron una concentración máxima de anti-factor-Xa cuatro horas después de la administración. Doce horas después de la inyección, el nivel había disminuido al 50% del nivel máximo y 24 horas después de la administración no quedaba ningún nivel medible de anti-factor-Xa. Las ovejas necesitaron 350 unidades de dalteparina una vez al día para alcanzar un nivel de anti-factor-Xa de 0,6 a 0,8 unidades. No se produjo ningún evento tromboembólico en las cuatro ovejas que recibieron la dosis adaptada al peso de dalteparina (350 UI/día) de acuerdo con los resultados del estudio de búsqueda de dosis después de la implantación de una válvula pulmonar transcatéter. Los resultados macroscópicos e histológicos no mostraron signos de ninguna afección trombótica del injerto.
Conclusiones: Las ovejas requieren cantidades mucho mayores de dalteparina (HBPM) que los humanos para alcanzar niveles sanguíneos comparables de anti-factor Xa.